Has tratado mil veces de empezar una dieta, te levantas ese lunes 100% motivado pensando que realmente lo lograrás, sin embargo, llega un momento de la tarde en que algo en tu mente te controla casi como si fuera una fuerza externa y vuelves a caer en la tentación? En Benefit te enseñamos estrategias para lograrlo.
1. Come sentado
Al comer sentado y sin distractores, aunque sea ese impulso vespertino, estarás más consiente del consumo de alimentos y la sensación de saciedad que te generan los alimentos.
2- Elimina tentaciones
Si lo piensas bien, muchos de tus impulsos por comer se repiten tanto en horario como en el contenido de lo que comes, por lo que te recomendamos tener a mano snacks saludables y no comprar aquellos alimentos que más te tienten.
3- Reduce el azúcar
Los alimentos dulces activan un sistema cerebral como si fueran una droga, generando dependencia de ese sabor por lo que te recomendamos ir eliminando los dulces de tu dieta de forma gradual.
4- Toma agua
La sensación de sed muchas veces es confundida con hambre, además de que tomar agua mantendrá tu estómago distendido generando mayor sensación de saciedad.
5- No pases más de 3 horas en ayuno
Mientras más tiempo pasas sin comer, mayor es el hambre que se genera a lo largo del día y tu metabolismo se mantiene en un estado de reposo. Es ideal comer 3 comidas y dos colaciones al día.
6- Has ejercicio
La actividad física es un ansiolítico natural y por lo tanto, el mejor remedio contra los impulsos por comer. Te recomendamos hacer ejercicio sobre todo a las horas de mayor ansiedad.
7- Distrae la mente
¿Te parece conocida la frase “como de aburrido”?. Cuando sientas deseos de comer concéntrate en alguna actividad que mantenga ocupada tu mente.
8- Toma un buen desayuno
Durante la mañana, el cuerpo ha perdido sus reservas energéticas por lo que debes alimentarte bien para repletarlas, tener más energía y activar tu metabolismo, de esa forma sentirás menos necesidad de comer al final del día.
9- Relájate
Actividades como el yoga, la meditación o ejercicios de respiración reducen el estrés, hacen que te sientas bien contigo mismo y puedes pensar mejor tus decisiones y regular los impulsos por comer.
10- Come más proteínas
Las proteínas generan mayor sensación de saciedad además de generar un mayor gasto calórico al momento de digerirse.