Alimentación para diabéticos
Son tantas las privaciones que, muchas veces, construir una dieta atractiva y diversa se torna un problema muy complejo para quienes sufren esta enfermedad. La clave puede estar en hacer algunos cambios en el estilo de alimentación y tomar en cuenta que se puede comer muchos alimentos, siempre y cuando, consideremos las cantidades. De todas formas, te recordamos que la mejor indicación para estos casos es que un profesional atienda tu caso individualmente y te asesore en la construcción de tu dieta.
Sin perjuicio de ello, y contemplando que para cada paciente la dieta puede ser distinta, se recomienda, que para la confección de la dieta se considere:
• El consumo de carbohidratos diarios es lo más delicado en estos casos. Recuerda que alimentos como la quínoa, arvejas, habas y camote también forman parte de esta categoría, pero va a depender de la composición de cada uno de ellos y del índice glicémico del paciente, entre otras cosas, cuáles son los que deben ser restringidos y cuáles son los recomendables para consumir.
• Generalmente, las frutas y verduras son positivas por su alta composición en vitaminas, minerales y fibra, acompañado de una baja cantidad de grasa, por lo que es recomendable consumir 5 porciones de frutas y verduras al día, siendo máximo 2 porciones de frutas y el resto en verduras.
• Con la leche o lácteos elige los productos sin grasa o bajos en grasa y así tendrás mejores opciones de cantidad de consumo. No es conveniente eliminar la ingesta de calcio ni las vitaminas que estos aportan, por lo que te recomendamos incluir productos como leche descremada, quesillo.
Con las proteínas en general y, especialmente, las carnes las porciones serán igual a las que consume un individuo regular. Toma como referencia el puño de la mano e ingiere 2 veces al día.