Se acerca fin de año y, particularmente unas fechas en que nos gusta celebrar con la familia y amigos. En muchos casos eso también implica juntarse a comer y tomar algo rico para acompañar las cenas de Navidad y Año Nuevo.
El panorama se vuelve aún mejor cuando tenemos la posibilidad de disfrutar de rica comida, sin caer necesariamente en excesos que pueden hacernos salir mucho de nuestra alimentación habitual, o incluso sentir malestar o derechamente subir de peso, en casos extremos.
Por eso, queremos darte ideas para que puedas sorprender a tus invitados con algunos alimentos que podrán hacer que tu celebración sea rica, pero sin abusar de frituras, grasas o azúcar.
Cóctel previo: la idea es empezar con algo liviano, es el momento ideal para comer de forma relajada y compartir. En este caso lo óptimo es evitar snacks fritos o con altas cantidades de sal. A cambio, una buena sugerencia pueden ser bastones de zanahoria, apio y pepino, con algún aderezo bajo en calorías o bien con yogurt natural con menta o ciboulette. Otra buena alternativa para untar puede ser el hummus, una pasta hecha en base a garbanzos.
Plato de fondo: uno de los aspectos más importantes es evitar el exceso de carbohidratos. En caso de que la preparación sea en base a carne, es preferible que ésta sea magra (filete de vacuno, pavo o pescados).
Como acompañamiento siempre será preferible alguna variedad de verduras. Es bueno considerar que hay carbohidratos que tienen un mayor aporte nutricional, como por ejemplo la quinoa, el arroz integral o el camote. Todas esas opciones son considerados carbohidratos de mejor calidad y son preferibles antes que los más típicos, como el arroz blanco o la papa.
Además también se recomienda que en la mesa haya ensaladas frescas, que pueden ser condimentadas con aderezos bajos en calorías hechos en casa. Por el contrario, es recomendable evitar aquellos que son envasados, como la salsa ranchera y césar, ya que al ser procesados, les agregan calorías innecesarias a nuestras ensaladas.
Postre: en estas fechas contamos con una importante variedad de frutas. Con una buena combinación de ellas se podría hacer un postre rico, por ejemplo, en formato de brochetas.
Si la tentación por un pastel es muy grande, prefiere aquellos que son bajos en azúcar o que, derechamente no tienen. También hay algunas marcas de helado que cumplen esa característica.
Sin embargo, por distintas razones, el algunas ocasiones no tenemos la opción de elegir (por ejemplo, si somos los invitados a comer), sugerimos comer en las cantidades que correspondan, sin repetirnos.
Una vez terminada la comida y el postre, es recomendable retirar todo de la mesa, ya que si vemos que aún tenemos comida cerca, existe la posibilidad de que sigamos “picoteando” de todo, aún estando ya satisfechos.
¿Algo para tomar?
En éstos días de calor, nada mejor que refrescarnos con una limonada hecha con endulzante y a la que podemos agregar algunos ingredientes que la harán aún más rica, como por ejemplo jengibre, menta o albahaca. Podemos usar una a la vez, o bien atrevernos a mezclarlas.
Otra buena opción para acompañar la comida, sin necesidad de recurrir a bebidas azucaradas, son las aguas saborizadas que puedes hacer fácilmente en casa.
Si el brindis es con alcohol, puede ser espumante (hay variedades sin azúcar, como el nature y otros muy bajos en azúcar, como el extra brut) o también vino, idealmente no más de dos copas.
Como te hemos sugerido en otras ocasiones, siempre aconsejamos realizar actividad física con cierta periodicidad. Y particularmente hacerlo al día siguiente de la celebración es aconsejable. Por ejemplo, caminar unos 30 o 40 minutos. No obstante, es aún más recomendable seguir con nuestra actividad física que siempre solemos hacer y no excusarnos en las fiestas de fin de año para dejar de hacerlo.
Como ves, son consejos muy sencillos y que pueden hacer que lo pases bien, sin que tu cuerpo lo resienta. Ahora, ¡a celebrar!