Como sabemos, el sobrepeso es uno de los grandes enemigos para nuestra salud, ya que es uno de los principales gatillantes de distintas enfermedades, como por ejemplo la diabetes, enfermedades cardiovasculares, hipertensión arterial, entre otras.
Sin embargo, también se relaciona directamente con otras condiciones, dentro de las que destacan los trastornos de sueño, siendo un factor determinante para desarrollar SAHOS, síndrome de apnea e hiponea obstructiva del sueño.
Esta situación tiene en alerta a expertos y autoridades en todo el mundo y también de Chile, ya que se relaciona directamente a mayor enfermedad cardiovascular y mortalidad precoz, en el contexto donde el 67% de los chilenos en edad adulta tiene exceso de peso. ¡Más de la mitad!
Apnea del sueño y sobrepeso
Seguramente después de enterarnos de esas cifras, la pregunta que surge de inmediato es: ¿qué es exactamente la apnea del sueño? En palabras sencillas es la suspensión de la respiración por un lapso de tiempo mientras la persona está durmiendo.
En algunos casos, ese período de tiempo puede ser incluso más prolongado (superando los 10 segundos sin respirar), sin embargo, aún así en muchos casos los pacientes no se percatan que padecen apnea del sueño. De hecho, el 60% de la población adulta en Chile ronca, no obstante sólo un 10% de ellas tiene apneas. Por lo tanto, podemos inferir que el roncar no necesariamente está asociada a la apnea del sueño, aunque es uno de sus principales síntomas.
Aunque parezca una situación puntual en medio del sueño, la apnea tiene consecuencias que también se manifiestan durante el día en quienes la padecen, como somnolencia, cansancio, irritabilidad y problemas con la concentración y la memoria, entre otros.
La apnea del sueño se asocia a exceso de peso, porque el tejido adiposo en la zona de las vías respiratorias (garganta, amígdalas, lengua y paladar), puede generar una tensión extra en los músculos y una posible obstrucción, disminuyendo el flujo de oxígeno.
Una situación similar puede ocurrir con la grasa que rodea el abdomen, ya que se genera una presión contra la pared del tórax, afectando la respiración.
¿Cómo combatirla?
Una vez que la apnea del sueño ha sido diagnosticada, clínicamente y con un examen denominado polisomnografía, el paciente debe procurar evitar el consumo de alcohol y tabaco principalmente de noche, además evitar consumir relajantes musculares o sedantes.
Por otra parte, uno de los principales aliados de quienes padecen este trastorno del sueño será la actividad física y una alimentación adecuada, que permitan regular el peso.
Es fundamental detectarla para evitar las
consecuencias en la salud y también sociales que conlleva (como los problemas
con el entorno familiar al dormir y social). Entonces combatir el exceso de
peso no es simplemente un asunto de estética, es mucho más amplio que eso:
tiene que ver con la regulación de una función tan fundamental como es el
sueño.