¿Somos realmente conscientes de lo que compramos y tenemos en la casa? La pregunta surge casi de manera espontánea si nos detenemos unos minutos y miramos qué es lo que encontramos en nuestra despensa.
Es posible que lleguemos a un punto en que, al ir a comprar la mercadería al supermercado (o al pedirla a domicilio) se vuelva un acto tan mecánico, que ya tengamos pre configurado en nuestra cabeza lo que necesitamos, lo que determina finalmente, qué es lo que vamos a comer.
Entonces, la invitación es a reflexionar sobre lo que periódicamente compramos para alimentarnos. Queremos que esa reflexión vaya de la mano con una decisión de compra informada, para que la próxima lista del supermercado sea hecha más a conciencia, con alimentos que nos permitan nutrirnos de forma adecuada.
Sellos
Una de las herramientas más conocidas para comprar informados, es la que nos entregan los sellos “ALTOS EN” que traen algunos alimentos. En Chile esto es está regulado por una ley que entró en vigencia en junio del 2016 y representa una buena forma para elegir (o descartar) productos cuando estamos frente a una vitrina.
¿Por qué es importante este tipo de información? Porque cada sello representa un “exceso” de nutrientes críticos tanto en alimentos sólidos, como en alimentos líquidos. En ambos casos se contemplan sodio, grasa, azúcar y calorías.
En los alimentos sólidos, los productos deberán tener un sello de advertencia en el caso de que cada 100 gramos sobrepasen las 300 calorías, 500 mg de sodio, 15 gramos de azúcar y 5 de grasa.
En el caso de los líquidos, cada 100 cc. tendrán que llevar sellos en el caso de que superen las 80 calorías, 100 mg de sodio, 5 gramos de azúcares y 3 de grasa.
Prefiere alimentos sin sellos
Tabla de información nutricional
Una buena práctica que debería hacerse costumbre, es revisar la tabla nutricional de los productos, también reguladas por ley, para poder tomar una decisión teniendo a la mano información fundamental, sobre todo cuando se trata de elegir productos saludables por sobre otros que podrían no serlo.
Te invitamos a comparar productos de distintas marcas y elegir los con menos (o sin azúcar), menos grasa y más fibra.
Ingredientes
Algo fundamental de la alimentación saludable es consumir la menor cantidad de productos procesados posibles, al leer los ingredientes vemos si el alimento contiene químicos (preservantes, aditivos, te invitamos a elegir los con menos ingredientes químicos.
Azúcar
Como sabemos, el azúcar está presente en una gran cantidad de alimentos procesados, los cuales pueden ser dañinos para la salud si se consumen en exceso. Aun cuando tratamos de evitar el consumo de azúcar, puede que lo estemos haciendo sin darnos cuenta.
Si no miramos en detalle los etiquetados (que mencionamos en los puntos anteriores), puede que el alimento contenga azúcar a pesar de que nosotros creamos que no, o en su envase estará declarado que lo contiene, pero con un nombre distinto.
Es que existe una cantidad impresionante de nombres con los cuales se le denomina al azúcar, algunos definitivamente son desconocidos o difíciles de descifrar.
Entre los principales “sinónimos” del azúcar están: dextrina, dextrosa, fructosa, sacarosa maltodextrina y jarabe de maíz de alta fructosa.
Prefiere orgánico
Como hemos visto, los alimentos en los que encontraremos mayormente los sellos “ALTOS EN” corresponden a alimentos procesados, y simplemente poniendo atención al elegirlos podemos identificar qué tan poco saludables pueden ser.
Por el contrario, los alimentos orgánicos están en el extremo opuesto de los procesados, dado que no tienen colorantes, saborizantes ni conservantes artificiales. Además, están libres de aditivos químicos y en el caso de los alimentos orgánicos de origen vegetal, no tienen pesticidas ni fertilizantes.
Las diferencias entre un tipo de alimento y otro saltan a la vista. Lo importante es estar informados para hacer compras más inteligentes y saludables. Las herramientas para hacerlo están a la mano, sólo debemos ocuparlas.